martes, 22 de enero de 2008

apoyos: Mathias Reinchenbach-Klinke

9 comentarios:

Unknown dijo...

Soy arquitecto.
Valoro la obra de Cotelo, y sus propuestas que ilusionan y abren campo a otras posibilidades dentro de este triste panorama donde nos movemos.
Pero, tambien valoro la legalidad. No conozco los detalles del caso, pero sé que es un suelo rústico de protección de cauce, donde no se permiten nuevas edificaciones.
El ejecutar una MAGNIFICA OBRA DE ARQUITECTURA no puede ser excusa para no cumplir con la LEY. Y esto los arquitectos tambien lo debemos de defender.
Confio y deseo, que se encuentre una solución digna y correcta a este caso.

Tuytu dijo...

Santiago:

Coincido plenamente contigo en la excepcional calidad de la obra de Víctor López Cotelo.
En lo que difiero es en la aplicación de la ley. Esa ley es un Plan Municipal redactada indirectamente por el Ayuntamiento (principal parte demandada) y aprobada y promulgada por instancias superiores para garantizar un cierto orden en nuestro territorio. Y coincidirás conmigo en que el Plan de Santiago es ejemplar para otros muchos municipios (a la vista están los resultados) y los libra de sospecha de la existencia de ciertos intereses personales, que es la lacra de nuestros ayuntamientos. Pues bien, el juez parece querer explicar el espíritu del plan a quien lo redactó, erigiéndose en arquitecto y desestimando los informes técnicos. No puede ser que una ley que precisamente pretendía propiciar ejemplos de buena arquitectura e intervención en el paisaje como éste ahora los condene. Es un total absurdo.
Por otra parte, lo controvertido del asunto es la interpretación muy personal que hacen los magistrados de esa ley. Los dos puntos que admiten a recurso son:
-Los referidos a la ampliación del 20% sobre lo ya construido. Dicho porcentaje se cumple, aunque los jueces interpretan que esa ampliación ha de ser estar pegada a la antigua, alegando que las que han construído son edificaciones de nueva planta. Es contradictorio; ¿cómo pretenden que se amplien sin nueva planta? Este término no implica si la edificación ha de estar exenta o no; una ampliación pegada es tambien de nueva planta. Lo contrario es rehabilitación ó restauración ciñéndose totalmente al recinto original.
-Los referidos a las cubiertas, que si bien admite que puedan ser de zinc y no de teja, dictamina que han de ser a dos aguas como las originales. No se sabe cómo era el trazado exacto de las originales, y yo no sé que es una cubierta a dos aguas; una cubierta con un faldón de 6m y otro de 10cm también es a dos aguas. En cualquier caso, este sería un apartado menor que pienso que no implicaría la demolición, aunque sí la sustitución de cubierta.
No me parece que esta sea una sentencia ejemplar. Es difícil hacer paisaje y ciudad si se entrometen tantos chefs en la cocina, y deshacen lo que tanto ha costado hacer, justo cuando todos los esfuerzos comenzaban a dar su fruto.
Una vez más, vemos que el sentido común es el menos común de los sentidos. Yo también espero una solución justa. De lo contrario, sólo cabe la desesperanza y el descreimiento.
Siento la extensión. Menuda parrafada. ¡Y eso que te aseguro que no soy parte interesada del pleito!. Sólo me interesa que las cosas se empiecen a hacer bien, y avancemos.

Unknown dijo...

La decisión judicial sobre "Ponte Sarela" abre una puerta peligrosa e inadmisible para los Arquitectos en la que la inseguridad legal de sus obras es absoluta. Ya no parece suficiente la profusa normativa municipal, autonómica y estatal, a veces excesiva, confusa y/o contradictoria con la que acotan nuestros proyectos sino que ahora pareciera quedar todo esto sujeto a las interpretaciones de personas con muy poca, o nula, formación técnica por mas jueces que sean.
Esto abre la puerta a la inseguridad jurídica mas absoluta de nuestros proyectos con el consiguiente riesgo para TODOS los intervinientes en el proceso constructivo, ya que si no queda acotado claramente nuestro ámbito normativo de acción el riesgo es claramente inasumible.
Estamos ante un claro caso de alarma social por la gran cantidad de afectados que pueden encontrarse inmersos en un grave problema ante la decisión subjetiva e inepta de un juez trasnochado.

Julio Vazquez Suarez

Anónimo dijo...

Hola Idoia
Ahi va mi primer comentario. Mira mi blog y veras como funciona la inmediated. No se entro en tu blog


Estoy de acuerdo contigo de que el campo de la arquitectura debe permanecer en manos de los arquitectos. Como también creo en el urbanismo sostenible y medio ambiente, al contrario de Candido, pienso que el diseño urbano de Santiago visto desde esta óptica no es nada ejemplar.
Santiago es una ciudad entre ríos y ésta es una realidad de la que el actual plan no se quiere enterar. Un río aquí en Santiago une barrios la intervención a ambos lados de sus riberas son un potencial natural de cohesión social entre barrios de que el plan no desarrolla.
Por otro lado pienso que el urbanismo tienen que aportar directrices validadas para intervenir en el territorio de cualquier parte del mundo y el actual plan esta lleno de números 20% etc.Lo encuentro absurdo.El plan general de Santiago se olvida del territorio y simplemente aporta datos de control jurídico que muchas veces nada tienen que ver con el DISEÑAR CIUDAD.
Me da igual los autores de los proyectos; si las soluciones son validas dentro del concepto de ciudad sostenible.
Bien venida a la blogosfera

TERESA BANET, arquitecta

Tuytu dijo...

Estoy de acuerdo contigo, Teresa. Yo también creo en el urbanismo sostenible, aunque sea una expresión un tanto redundante.¿Es que cabe la existencia de algún otro? Toda buena práctica arquitectónica y urbanística ha de serlo, entre otras muchas cosas. Bueno, a lo mejor es que le tengo cierto reparo al término tan manido de "sostenibilidad", por lo mucho que lo soban frívolamente en política para adquirir ciertas cuotas de ecologismo, que tan de moda está y tan bien queda en las campañas...
Y en cuanto a la ejemplaridad del plan de Santiago, qué quieres que te diga. Por supuesto que es muy mejorable, y que ha provocado intervenciones recientes bastante desafortunadas, sobre todo en el sur, hacia Conxo y por la carretera de Noia. Santiago no es sólo el barroco y el neoclásico; el entramado de sus rueiros, que entregan delicadamente la ciudad culta al tejido rural y al paisaje en una rica y compleja red, son tan importantes como el propio casco histórico, y han de ser tratados con el mismo respeto, controlando los desarrollos desaforados como el que ahora ocupa la Choupana y Santa Marta; es necesario no volver a cometer los mismos errores que en el ensanche, y para ello no basta con más sección de calle. En este aspecto es donde la obra de Ponte Sarela marcaba un camino a seguir en las periferias rurales.
Dentro del triste panorama gallego, el urbanismo de Santiago es la mejor referencia cercana que tenemos, junto con otras excepciones como Oleiros o Allariz.
Por otro lado, las alturas, porcentajes, límites numéricos y demás cuantificaciones son cosustanciales a cualquier ley. Las normativas surgen cuando falla el sentido común. También se dice que son necesarias para paliar la desconfianza y la insolidaridad. Entonces, se generalizan los posibles casos, café para todos, y no se profundiza. Y claro, esto invita a múltiples interpretaciones. Creo que todas las leyes, así como la democracia, son un mal menor, (o lo menos malo), pero en esta ocasión se han convertido en algo nefasto. Lo que debía constituir un ejemplo de intervención en el paisaje es condenado por la justicia, lo que crea desconcierto entre la gente, que no sabe a qué atenerse.
Casos como éste o el del teatro romano de Sagunto (que también tiene tela…), me desalientan profundamente, y hacen que pierda la poca fe que tenía en nuestra cultura social, tan distante de las europeas. Antes creía que estábamos en un país en el que estaba todo por hacer. Empiezo a pensar que en realidad no hay nada que hacer: parece un caso perdido.
Y ya van dos parrafadas; lo siento.

Un saludo.

Anónimo dijo...

É imposible que os galegos merezamos unha xustiza de democracia bananeira como esta. Para onde mirarán cando chegan a O Carballiño e á Illa de Toralla? Soio desexo que unha mañán estes xusticieiros se ergan coa mesma inspiración de aplicar as súas leis e se esmeren así en todas con todas as desfeitas que temos no país.

Xoán Lois

Anónimo dijo...

hola

Anónimo dijo...

Hola Cándido
Quizás me estoy perdiendo algo pero ¿porque no se valora que santiago es una ciudad entre ríos? Uno aporto desarrollo económico: El Sarela y otro alimentos a la ciudad: El Sar
¿Crees que el plan actual recoge estos dos ríos como elementos integrantes del territorio o son puntuales adornos a modo de parque de la ciudad?
¿Conoces sus nacimientos? simplemente IMPRESENTABLES y por encima son el origen cuyo fin se encuentra en Padrón.
Mira en mi blog: http://tbanet.wordpress.com/ el denigrante tratamiento del nacimiento del río Corvo afluente del Sarela.
Mira el crecimiento de la ciudad en la zona norte.Solo se puede llorar pero jamas decir que el plan de santiago es ejemplar. y...¿ que sucede con la ciudad de las cinco colinas, donde están?
¿Porqué el PGOU no se adapto a su histórico territorio? Sus corredoiras....no se, me suena a cánticos celestiales como la estructura de barrios y espacios urbanos para la relación ciudadana.

Hola Joan
Republica bananera no lo se pero lo bueno que tienen las TIC son que entre unos pocos debatimos y podemos crear opinión. Ponte en positivo

Un saludo

TERESA BANET, arquitecta

Tuytu dijo...

"Entre el Sar y el Sarela discurre Compostela" dice el Códice Calixtino. Pero está claro que hoy este aspecto se ha dejado bastante de lado, no lo discuto. De hecho, hace años, en una asignatura de la escuela de Arquitectura, estudiamos Santiago y su territorio, y recuerdo que mi trabajo se centró en el análisis las riberas del Sarela, proponiendo modos de recuperar su presencia estructuradora en la ciudad y el planeamiento. Quizás no fue un trabajo muy intenso, pero clarificaba ciertas cosas y ayudaba a entender mejor la relación de lo construido con su medio natural. Soy, pues, consciente de la importancia de la hidrografía en Santiago, y creo en su potencial como generador de paisaje y ciudad.
Y si bien el planeamiento no profundiza en este tema, el proyecto de Ponte Sarela (del cual versa realmente este blog) es todo un ejemplo a seguir (este sí...) de cómo actuar en las inmediaciones de los cauces y recuperar todo un patrimonio asociado a ellos. Ahí tienes; un ejemplo paradigmático de lo que tú reivindicas, y lo abaten...

Quizás donde dije "ejemplar" debería haber dicho..."podemos darnos con un canto en los dientes...". Reitero, como digo en mi anterior comentario, que tal como está el panorama en Galicia, es de lo mejor, aunque sea muy mejorable. De lo menos malo...
Por cierto, una de las colinas ya la están desmochando, para colocar en su sitio una artificial. Un sinsentido...
Un saludo.
p.d: No sé qué habrá de cierto:
http://www.lavozdegalicia.es/hemeroteca/2002/11/05/1309120.shtml
La noticia es del 2002, y no sé si ha cambiado algo desde entonces...

Manifiesto

Desde hace 10 años el promotor gallego Otero Pombo desarrolla un proyecto del arquitecto Víctor López Cotelo para la rehabilitación del complejo industrial de la antigua fábrica de curtidos del “Puente Sarela” en Santiago de Compostela para una instalación hotelera.
Dicho proyecto obtuvo en su día la licencia municipal de obras del Ayuntamiento de Santiago de Compostela así como la autorización y elogio de la comisión de Patrimonio de la Consejería de Cultura y la aprobación de la Consejería de Política Territorial Obras Públicas e Transportes de la Xunta de Galicia.
Recientemente una insólita decisión judicial de la última instancia de la justicia gallega ordena, contra el criterio de todas las instituciones antes mencionadas y del propio perito judicial, la demolición de todo lo nuevo edificado basándose en una interpretación absolutamente reductora de la normativa urbanística.
Dicha normativa autoriza a incrementar la superficie existente en un 20%. Lo novedoso e insólito de la decisión del juez contra todas las decisiones anteriores es que dicho 20% sólo se puede construir adosado a la edificación existente, y por ello ordena el derribo de lo ejecutado que amplía la instalación industrial con nuevos cuerpos edificados que se integran en el terreno separadamente, siguiendo la estructura de la antigua fábrica que constaba de edificaciones separadas.
Para completar el marco en el que se extiende esa orden de demolición hay que añadir que los edificios que ocupan las siete parcelas contiguas a este complejo industrial son todas ilegales siendo la intervención sancionada la única que cuenta con todas las autorizaciones exigidas y además que la actual normativa urbanística en vigor autoriza un 50% de nueva edificación frente al 20% del la antigua normativa.
Ante estos insólitos hechos creemos necesaria una clara respuesta de los arquitectos exigiendo respeto a su disciplina para que la arquitectura pueda desarrollarse como parte esencial de la cultura y del progreso.
Puedes sumarte a este manifiesto enviando una carta de apoyo, tu comentario o, simplemente, tu firma.